Se trata de incidir en la interseccionalidad que caracteriza los procesos de exclusión social y constatar que los diferentes “perfiles” que podemos identificar dentro del sinhogarismo no se derivan únicamente del grado de acumulación de desventajas sociales, sino también de la interacción compleja y específica de procesos que da lugar a diferencias cualitativas en las características del sinhogarismo.
Tal y como se detalla en el informe (especialmente en el capítulo 4), el análisis del sinhogarismo requiere de la consideración simultánea de un conjunto amplio de procesos socioeconómicos y biográficos.

Considerar esta complejidad contribuirá a mejorar los procesos y programas de protección social y acompañamiento psicosocial, evitando una excesiva simplificación de la intervención social en situaciones de sinhogarismo.

Igualmente, la consideración de determinadas características sociodemográficas (edad, sexo, nacionalidad) implica la existencia de rasgos distintivos en el proceso de exclusión social asociado al sinhogarismo.

Es especialmente importante tener presente que la multiplicidad de las causas y consecuencias del sinhogarismo complican sobremanera generar “recetas” universalmente válidas para atajar y reconducir las biografías de exclusión que caracterizan a estos ciudadanos/as. En este sentido, los rasgos específicos del sinhogarismo en las personas jóvenes, o en las personas migrantes, o en las mujeres, llaman la atención sobre el incremento de la complejidad que caracteriza a los procesos de exclusión, y sugieren la necesidad de estudios y descripciones específicas que aborden la interseccionalidad que caracteriza el sinhogarismo en la sociedad española contemporánea.